
Conchita Wurst ha asistido a la gala benéfica Life Ball 2018 con un nuevo aspecto. La cantante ha dejado atrás su característica melena y barba negras y ahora ha apostado por el rubio.
Tras confesar que es portadora del VIH, Conchita Wurst ha sido una de las protagonistas del evento Life Ball 2018, una de las galas benéficas más importantes del mundo y que tiene como objetivo recaudar fondos contra el sida.
Sin embargo, lo que más ha llamado la atención ha sido su nuevo look. La cantante, que desde Eurovisión 2014 ha lucido una melena y barba negra, ahora se ha atrevido con el rubio.